Las flores y sus cuidados.

Las plantas de interior y sus cuidados. Las plantas y flores, las flores y chocolates, las plantas raras y bonitas, un ramo de rosas rojas y blancas, o simplemente flores y bombones son el perfecto regalo. Pero quedarás muy bien si regalas ramos de chocolates y flores o ramo de flores y chocolates como prefieras. Ayer tuvimos una comida, y uno de los invitados trajo un precioso ramo de Agapanthus mezclado en el mismo jarrón de cristal con la Fotinia o Photinia serratifolia. El resultado, una preciosidad, os dejo la foto.

Hibiscus

Las flores y sus cuidados es muy importante cuidar bien a nuestras flores. El hibiscus pertenece a la familia de las malvaceae, tembién es llamada rosa de china.

Se cultiva en interior, y hay dos especies del amplio género hibiscus o hibiscos. Son arbustos muy ramificados, que alcanzan tamaños de 1,80 metros o más, pero que pueden contenerse mediante podas drásticas. Son importante los cuidados de las flores que crecen en nuestro jardín.

Las hojas, sobre peciolos de 2,5 a 5 cm, son casi ovales, puntiagudas, de 5-7,5 cm de longitud y 2,5-4 de anchura, de color verde oscuro, con el borde dentado. Los cuidados de las flores siempre ayudan, éstas son en forma de embudo, teniendo una vida corta y nacen en las axilas foliares de la parte superior de tallos y ramas entre el final de la primavera y el verano.

Las flores y sus cuidados, variedades recomendadas.

Las variedades más recomendadas son: H. rosa-sinensis. Tiene flores de 12,5 cm de diámetro, de color rosa oscuro, con un solo verticilo de cinco pétalos, estas flores no precisan de grandes cuidados.

Existen bastantes variedades con cinco o más pétalos y color blanco, amarillo, rosa, naranja o rojo. Los estambres se unen en una sola columna de 5 cm de longitud, o bien en racimos abiertos.

Existen también algunas variedades como la “variegata”. En España se cultivan mucho en jardines ya que sus flores no precisan de muchos cuidados y se conocen vulgarmente con el nombre de Pacíficos o Rosas de China.

H. schizopetalus. Tiene tallos tendidos que generalmente necesitan soportes. Las flores, color rojo anaranjadas, de 5 cm de diámetro con pétalos divididos en flecos y curvados hacia adentro, cuelgan sobre pedúnculos de 5 cm. Tienen una columna en forma estaminal de 7,5 cm que se proyecta fuera de la flor.

Cuidados de las flores y su cultivo

Aunque el hibiscus no precisa de los cuidados y cultivo de la flor de lis si es conveniente tener en cuenta los siguientes puntos:

Luz. Manténgase en luz intensa, con alguna luz solar directa al día esto ayudará a tener cuidadas las flores.

Temperatura. Durante el período de crecimiento activo, son suficientes las temperaturas de las habitaciones. Manténgase 13ºC durante los dos o tres meses de letargo invernal.

Riego. El hibiscos no necesita el riego y cuidados de la flor de pascua pero si precisa de algunos cuidados. Durante el período de crecimiento activo, riéguese moderadamente, permitiendo que el centímetro superior de la mezcla se seque entre dos riegos. Durante el período de letargo invernal, sólo deberá regarse lo imprescindible para que no se seque totalmente el sustrato ya que sus flores no precisan de cuidados en esta época.

Además, hay que tener en cuenta en las flores y sus cuidados

Fertilización. Aplíquese cada dos meses, durante el período de crecimiento activo, líquido fertilizante con elevado contenido en potasa.

Sustratos y trasplantes. Utilícese un abono con mezcla para plantas de interior. Es recomendable trasplantarse a tiestos 2,5 cm mayores cada primavera, hasta el máximo recomendable. Después, con el fin de cuidar mejor las flores cámbiese la mezcla cada año.

Propagación. Suele ser en primavera o verano mediante esquejes terminales de 7,5 a 10 cm de longitud o esquejes con talón. Es recomendable plantar cada uno en un tiesto de 7,5 cm con partes iguales de turba y arena o perlita, encerrándolos en bolsa de plástico o propagador y situándolos en luz intensa filtrada.

Después de que la planta se enraíce, es conveniente descubrirla y ponerle y fertilizante; riéguense moderadamente. Al cabo de tres meses de iniciada la propagación, entonces es bueno trasplantarla a tiestos de 10 cm con mezcla para plantas de interior y trátense como hibiscos maduros, esta es una buena forma de cuidar de su hibiscos y de sus flores.

Consideraciones especiales. Al inicio de la primavera, córtense los crecimientos inadecuados, dejando los tallos a 15 cm de la base.

Adelfa

Algunas características

Nerium de la familia de las Apocynaceae.

Aunque el género comprende más de una especie, la más extendida en cultivo de jardinería y única en interior es N. oleander o lo que es lo mismo, la popular adelfa, baladre o laurel rosa.

El arbusto, silvestre en las zonas mediterráneas, se aprecia por sus racimos terminales de flores. Aunque en exterior puede alcanzar 6m o más, en tiesto no excede de los 2m e incluso menor altura si se trata adecuadamente para obtener formas enanas o se emplean variedades que naturalmente so son. Los tallos son leñosos y generalmente erectos, ramificándose a alturas equidistantes; cada ramificación produce dos o tres ramas.

Las hojas, duras, son estrechamente lanceoladas, de unos 25 cm de longitud y 2,5 de anchura, con un nervio central prominente y de color verde oscuro brillante. Aparecen sobre cortos peciolos en grupos de tres, igualmente espaciadas alrededor del tallo, con cierta tendencia a colgar, otras horizontales, y en muchos casos en ángulos de 45º con respecto al tallo.

Además, también hay que tener en cuenta.

Que las flores tienen diámetros de 2,5 a 5 cm, y cada grupo de seis a ocho, forma una inflorescencia en el extremo de una rama. En sitios cálidos florecen durante mucho tiempo, pero en tiestos de interior suelen tener limitada la floración al verano.

La especie típica de adelfa tiene la flor de color rosa, pero hay variedades rojas, púrpuras, amarillas, naranja y blancas. Existen de flor sencilla y otras denominadas de flor doble, producidas por cinco lóbulos petaloides nacidos de la base tubular de la flor, planos y dirigidos hacia afuera. Unidos a los pétalos normales, otorgan a la flor la apariencia de una pequeña rosa. Algunas formas tienen flores con perfume; otras no.

Las flores y sus cuidados, por ejemplo, su cultivo.

Luz. Requiere luz muy intensa, incluso solar directa, todo el año.

Temperatura. Pueden cultivarse en habitaciones normales. Les favorecen temperaturas de 15ºC durante su período anual de letargo. Toleran temperaturas inferiores a 8ºC, pero cuando son demasiado bajas producen daños en las hojas y ramas, aunque brotan posteriormente si vuelven a las condiciones normales.

Riego. Durante el período de crecimiento activo, riéguese moderadamente, humedeciendo la mezcla; no volverá a regarse hasta que el centímetro superior de la mezcla se haya secado. Durante el período de reposo, riéguese lo suficiente para que la mezcla no se seque del todo.

Fertilización. Aplíquese líquido fertilizante cada dos semanas, durante el período de crecimiento activo, ya que sus flores no requieren de más cuidados.

Sustratos y trasplantes. Utilícese mezcla para plantas de interior. En primavera, si las raíces han llenado el tiesto puede trasplantarse a macetas 2,5 cm mayores. Cuando las plantas se encuentren en tiestos del tamaño máximo conveniente, trasládense a jardineras o contenedores de cierto tamaño o efectúese tan sólo el cambio anual de mezcla. En los cambios de tiesto, afírmese bien la mezcla alrededor de las raíces.

Además, también hay que tener en cuenta.

La Propagación. Utilícense esquejes de 7,5 – 15 cm de longitud, que enraizarán fácilmente al comienzo del verano. Córtese limpiamente debajo de un nudo, quitando las tres hojas inferiores antes de plantarlos en una mezcla húmeda de turba y arena, a 4 -5 cm de profundidad. Sitúense los esquejes en habitaciones con luz intensa filtrada y riéguese para mantener la mezcla constantemente húmeda. Replántense en mezcla recomendada para plantas adultas y trátense como tales cuando aparezcan las raíces a través de los orificios de drenaje. Los esquejes pueden enraizarse en agua y plantarse en tiestos con mezcla cuando las raíces midan 2 cm de longitud.

Consideraciones especiales. Préstese especial atención a las cochinillas, a cuyo ataque son muy sensibles las adelfas. Suelen aparecer en el envés y en especial en la proximidad del nervio central. Utilícese un pincel fino impregnado de alcohol desnaturalizado o un aerosol con insecticida de garantía. Pódese a la mitad de su longitud todos los brotes que hayan florecido, tan pronto como las flores estén marchitas. Suprímanse algunos brotes laterales demasiado largos.

Advertencia: Las adelfas deben mantenerse lejos del alcance de los niños, ya que todas las partes de la planta son venenosas y pueden producir intoxicaciones si se ingieren.

Calas

Algunas características.

Zantedeschia de la familia de las Araceae.

El género Zantedeschia comprende las calas de nuestros jardines y tiestos, especies actuales, de grandes hojas sagitadas y notables flores. Las calas tienen rizomas carnosos y rastreros, de los que emanan gruesas raíces que penetran verticalmente en la mezcla. La flor típica tiene un espádice central erguido, rodeado de una espata muy decorativa; la inflorescencia nace en el extremo de un largo escapo robusto. En estado silvestre, las calas crecen en pantanos que generalmente se secan en verano, período en el que la planta se seca, pierde sus hojas y entra en período de letargo. Este ritmo vegetativo debe respetarse en el cultivo de interior. Zantedeschia es una planta de estación, pero su rizoma puede florecer de nuevo durante varios años en condiciones adecuadas de cultivo.

Variedades recomendadas

Z. aethiopica es la mayor de las calas. Sus hojas sagitadas, de color verde oscuro, de 45 cm de longitud y 25 de anchura, tienen peciolos de 1m. El pedúnculo floral aparece hacia el final del invierno o comienzos de la primavera; contiene una inflorescencia caracterizada por su espádice amarillo dorado, con espata de tonalidad blanco lechosa, de 15-25 cm de longitud, con borde enrollado levemente hacia afuera. Z. a. Childsiana, más compacta y florífera que la especie tipo, es de más frecuente cultivo en interior ya que sus flores precisan de mayores cuidados.

Z. albomaculata tiene hojas estrechas, triangulares, de color verde oscuro, manchadas de blanco plateado, con unos 45 cm de longitud y tan sólo 5-8 de anchura en la base. Los peciolos miden alrededor de 1m. La espata de la flor, de 10-12 cm, es más tubulosa que en Z. aethiopica; su color oscila del blanco al amarillo crema, pasando por el rosa. La base del tubo lleva una mancha púrpura en el interior y el espádice es blanco.

También están.

Z. elliottiana o cala amarilla, difiere de las otras especies por sus hojas verde oscuro, manchado de blanco. De 28 cm de longitud y 23 de anchura, por peciolos de 60 cm. La espata, de 15 cm, es de color amarillo vivo en el interior y amarillo verdoso en el exterior; el espádice es amarillo.

Z. Pentlandii es una cala originaria del Transvaal, que alcanza 60 cm de altura y presenta follaje caduco. Las hojas, con forma de flecha, son de color verde medio. Las espatas, de 15 cm de longitud, son amarillo oro intenso, con una mancha púrpura oscura en la base, y se abren en el mes de junio.

Z. rehmannii (Cala rosa), tiene hojas estrechas, adelgazadas en los dos extremos. Son de color verde medio, manchadas de blanco plateado, y miden 30 cm de longitud y 5 de anchura, con peciolos de 30 cm. Las espatas, abiertas en trompeta, miden casi 13 centímetros de longitud; son rosadas, rojas o púrpuras. El espádice es blanco crema.

Cada una de estas cuatro especies ha dado lugar a híbridos cuyas espatas son más o menos abiertas y presentan diversos tonos de rosa, crema, amarillo y rojo vivo.

Cuidados del cultivo de las flores.

Luz. Las calas necesitan iluminación intensa, con alguna luz solar directa durante los mes4es en que las plantas retienen el follaje. En el período de reposo (por lo general desde el final de primavera al comienzo del otoño), manténgase la planta en un rincón soleado del jardín o al exterior, en balcones, terrazas o patios. Evítense las heladas o las lluvias muy abundantes.

Temperatura. Desde el comienzo dl otoño, cuando se inicia la brotación, expóngase las Zantedeschia a temperaturas frescas, entre 10-13ºC, durante tres meses. A partir de entonces, elévese la temperatura a 16ºC para Z. aethiopica y 18 para otras especies e híbridos. Durante la floración, todas las calas pueden cultivarse en las condiciones normales de las habitaciones. Por encima de 21ºC, la floración es más corta y las hojas se marchitan antes. Cuando los rizomas se hallan en período de letargo, la temperatura no influye sobre ellos.

Riego. Cuando las plantas están recién plantadas, o los rizomas acaban de brotar después del letargo, el riego deberá ser escaso, el indispensable para humedecer el sustrato, dejando secar los dos tercios de la mezcla entre dos riegos. Se van aumentando en intensidad y frecuencia conforme se intensifica el crecimiento. Cuando las calas estén rodeadas de hojas, los riegos habrán de permitir que la mezcla se halle constantemente húmeda, ya que sus raíces necesitan en todo momento humedad; puede incluso mantenerse el tiesto dentro de otro recipiente con agua. Después de la floración deberán reducirse los riegos, llegando a interrumpirlos del todo cuando las hojas se hayan vuelto amarillas y caído. Déjense las calas en su tiesto durante el letargo, en el interior o en el jardín. Una leve lluvia no les perjudica, pero un temporal de agua puede dañarlas irremediablemente.

Además también hay que tener en cuenta.

La Fertilización. Cuando las calas hayan desarrollado sus hojas deben recibir un fertilizante líquido cada quince días. Durante la floración, el abonado se efectuará cada siete días. Al final de la floración se deja de fertilizar.

Sustratos y trasplantes. Utilícese mezcla para plantas de interior. Una planta normal, preparada para la floración, ocupará un tiesto de 16 cm, pero los grandes ejemplares necesitarán un tiesto mayor o una pequeña jardinera. Si fuera necesario, se pueden trasplantar en otoño, cuando se inicia la brotación. Cuando alcancen un tamaño excesivo deberán dividirse. En otoño es también la época en que se plantan los rixomas secos recién adquiridos. De 20-22,5 cm. Los rizomas se disponen horizontalmente, 5 cm por debajo de la superficie de la mezcla.

Sin olvidarse.

De la Propagación. Se efectúa por división de rizomas, o mediante brotes nuevos separados al trasplantar en otoño. Plántese cada trozo de rizoma en un tiesto de 15 cm con mezcla ligeramente húmeda, y trátese como ejemplar adulto. Los brotes se plantarán en tiestos de 7,5-10 cm con llenos de la misma mezcla y con los mismos cuidados de cultivo que la planta adulta.

El mejor método para obtener hibridos consiste en la palntación de semillas. Es una operación larga y complicada, que exige el empleo de un invernadero y que no suele estar al alcance del aficionado medio

Algunas consideraciones especiales.

La podredumbre bacteriana provoca amarilleamiento del follaje y una podredumbre húmeda y maloliente en e rizoma; se extienden rápidamente en suelo pesado y húmedo. Algunas plantas pueden sufrir virosis, caracterizada por las flores deformes y, sobre todo, manchas amarillas o blanquecinas en anillo en las hojas.

Margaritas

Algunas características.

Cbrysantemum de la familia de las Compositae

Los crisantemos pueden utilizarse como plantas temporales de interior y no deben mantenerse en las habitaciones cuando sus flores se hayan marchitado. Las dos especies más utilizadas son Ch. Frutescens (una de las margaritas blancas) y Ch. Morífolium. Ambas forman matas con tallos de madera blanda y racimos terminales de flores de tipo margaritas; difieren entre sí en otros caracteres. Ch. Frutescens florece sólo en verano y la mejor época para adquirir un ejemplar destinado al cultivo de interior es el final de la primavera. Ch. Morifolium, que florece un estado natural en los días cortos del final del otoño o comienzos del invierno, puede adquirirse en flor en cualquier época.

Variedades recomendadas

A partir de las especies tipo, existen una serie de variedades que difieren entre sí principalmente en el color y tamaño de las flores. Las de Ch. Frustescens tienen preferentemente tonos blancos, amarillos o rosas, mientras la gama de las Ch. Morifolium comprende blancas, cremas, amarillas, naranjas, rosas, roce o púrpura. Las flores suelen se tan numerosas en ambos casos que ocultan parte del follaje. Un denso círculo de pétalos rodea en cada flor un disco central más elevado.

Las flores y sus cuidados.

Luz. Ch. Frutescens debe recibir tres o cuatro horas diarias de luz solar directa ni se quiere evitar que pierda algunas flores. Ch. Morifolium necesita luz intensa, aunque no solar directa.

Temperatura. Necesitan más bien frío, pues les conviene de 13 a 19ºC. Las temperaturas más cálidas acortan el período de floración. Para incrementar la humedad, sitúense los tiestos sobre bandejas de guijarros húmedos o en recipientes con turba húmeda.

Riego. Los crisantemos se secan rápidamente al colocarlos en interiores. Por ello necesitan un riego abundante para mantener húmeda la mezcla.

Fertilización. No es precisa en este tipo de plantas temporales.

Sustratos y trasplantes. No precisan trasplantes. Para efectos puramente decorativos pueden plantarse en terrinas, macetas o composiciones.

Propagación. La propagación en las casas es difícil para los aficionados.

Recomendación.

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También te podemos recomendar el Aprende cómo cuidar las plantas de tu jardín, con este vídeo que te he dejado.